En lo más profundo de las remotas montañas, vivía un joven llamado Nakbin con su madre chamán. Nakbin ansiaba aventurarse en el mundo, pero su madre se lo prohibía constantemente. Esto se debía a que Nakbin poseía extraordinarias habilidades chamánicas. Todo lo que su madre deseaba era una vida normal para su hijo. Pero a pesar de sus esfuerzos, el poder de Nakbin se descontroló. El poder desenfrenado de Nakbin crecía a medida que invocaba a numerosos dioses, uno tras otro. Aunque su madre luchó valientemente contra los dioses, al final se vio superada por su inmenso poder. El pequeño intervino y defendió a su madre justo a tiempo antes de que un poderoso dios antiguo la abatiera. El dios, conmovido por la pureza y valentía de Nakbin, se retiró. Sin embargo, al retirarse, dejó atrás una terrible profecía para Nakbin. Podría convertirse en el chamán elegido, uno con el potencial de salvar o destruir el mundo, un ser conocido como el “Antiguo Dios de la Tierra”.
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